24-06-2006

y tu?

“Hay dos clases de mujeres. La mujer-objeto, que se puede manejar, manipular y abarcar con la mirada, y que es el adorno de una vida masculina. Y la mujer-paisaje. A ésta el hombre la visita, se adentra en ella y corre el peligro de perderse. La primera es vertical, horizontal la segunda. La primera es voluble, caprichosa, reivindicativa, coqueta. La otra es taciturna, obstinada, posesiva, memoriosa, soñadora”

Michel Tournier, El Rey de los Alisos.

09-06-2006

hincha pelotas

Y llegó el mundial.

Pues, si no puedes contra ellos, úneteles.

Cada cuatro años las mujeres debemos ceder el control remoto frente a la inagotable presión que ejercen los cabezas de pelotas.

Sin embago, si miramos desde otra perspectiva, nosotras somos las más beneficiadas con el mundial, ya que mientras la atención de los hombres está depositada en la cancha, nosotras nos podemos deleitar con esculturales deportistas.

Bueno chicas a delitarse y aprovechar este mes en donde el mundo es nuestro, miestras ellos están con los ojos pegados frente al nuevo plasma con el que se endeudaron...

04-06-2006

Lección Secundaria

Las calles del país han visto avanzar a miles de adolescentes trasformados en líderes capaces de cambiar la historia de nuestra democracia.

En horabuena, ciudadanos.

Hasta hoy ningún movimiento sectorial había tenido tanto apoyo como el que hemos visto esta semana. ¿Cuál es la clave? La empatía. El sentimiento generalizado de que el salto cualitativo que necesita Chile para sobrepasar la barrera del subdesarrollo pasa, en gran medida, por una educación de calidad. Así, las movilizaciones de los secundarios se han trasformado en “la punta de lanza” de una demanda de toda la sociedad chilena.

Sostenidos por el respaldo ciudadano, los pingüinos lograron hacer el salto de medidas inmediatas, como el pase escolar y del precio de la PSU, a demandas que sustentan el sistema educacional chileno, la LOCE y la Jornada Escolar Completa, que –según un amplio consenso- se han mostrado poco efectivas para mejorar la calidad de la educación y para superar las brechas de desigualdad.

Estos adolescentes y su movimiento nos han dado una lección, al lograr lo que años de movilización universitaria no pudieron siquiera poner en el debate nacional: discutir la reforma de la LOCE.

Con este petitorio en la mano, los secundarios han logrado entrar en el juego de los adultos, mostrando una enorme capacidad para organizarse y tomarse -literalmente- en serio su educación. Esto, acompañado por líderes que se plantean frente a la opinión pública como hombres y mujeres firmes, claros y responsables, que se mantienen al margen de una adscripción partidista.

Sus propuestas son consideradas (aparentemente) justas por la mayoría de la población, y dejaron al descubierto el que ha sido probablemente el mayor fracaso de los gobiernos de la Concertación: la educación.

Todo esto explica, al menos en parte, un hecho novedoso: el apoyo transversal de la sociedad a sus demandas.

Mientras, al otro lado de la Moneda, los chilenos hemos sido testigos de la torpeza del “gobierno de los ciudadanos” para resolver tempranamente este conflicto. El Gobierno no supo leer el problema, ya que al coincidir con las clásicas revueltas de mayo promovidas por sectores de izquierda, se pensó que no trascendería del mensaje presidencial del 21. Se equivocaron. Los estudiantes han logrado mantener su movimiento en el ámbito local, impidiendo el intento de atribución política de determinados sectores.

Una vez que la estrategia cambió y decidieron paralizar sus propios colegios, la pacificación de la protesta legitimó sus demandas, y el propio Gobierno se vio obligado a desdecirse varias veces, aceptando el diálogo con estudiantes movilizados.

Hoy el Gobierno es apuntado con el dedo por represión policial del día martes y la sorprendente ausencia de la Presidenta de la República, que blindando su figura, ha perdiendo la oportunidad de mostrar liderazgo y un “enfoque cercano a la gente”.

Ahora, hay quienes nos preguntamos por el después. Esta extraña circunstancia en donde distintos sectores de la sociedad se han sintonizado con los estudiantes no perdurará, muy a nuestro pesar. Habrán acuerdos con el gobierno, y el congreso acordará abordar el tema de la educación, los partidos comenzarán a reinterpretar sus demandas y algunos de los dirigentes secundarios comenzarán a ser reclutados (cooptados, dirán otros) por los partidos políticos y sus juventudes.

El momento pasará, saldrán del colegio, automáticamente pasarán a formar parte de las listas de llamado para el Servicio Militar Obligatorio y no serán automáticamente parte del universo de votantes, por lo que es poco probable que los futuros candidatos estén pendientes de demandas cuyos resultados se verán en plazos superiores a 4 años. Y aquellos que hayan tenido la valentía de ingresar en alguno de los actuales partidos políticos, es poco probable que tengan una voz relevante antes del 2028, cuando tengan 40 años.

En ese escenario, este momento presenta una oportunidad bastante reducida, para crear un acuerdo nacional que impulse la educación en términos de calidad. Porque, para lograr un acuerdo histórico en el que nos juguemos la vida, se requiere más que un chispazo, se requiere una combustión permanente, y el combustible en cuestión es la participación.

La única manera de garantizar que los cambios necesarios se realicen es generar, lo antes posible, un espacio de participación que los incluya de forma sistemática, en el que todo aquel que desee participar lo haga sin necesidad de realizar trámites ni paralizar los colegios, las avenidas ni las alamedas. Un espacio institucional que actualmente no se los garantiza nadie.

La invitación para los secundarios, y para todo el país, es que sigan tomándose en serio su voz y su poder, para que aprovechemos esta preciosa contingencia para ganar más espacios de participación. Este es un momento que supera la lógica partidista, basada en alianzas del pasado, y permite generar proyectos de futuro a largo plazo, como lo requiere el tema de la educación.

"a tomarse chile"